

Liliana de la Vega nace de la fusión entre el movimiento, la intuición y la conexión con lo natural. Inspirada en la filosofía de los 5 ritmos, esta marca personal encapsula dinamismo, libertad y una personalidad creativa que fluye con la vida y los viajes.

Los elementos principales de la marca evocan la energía del mar y la fuerza de las mareas, elementos que representan poder, transformación y renovación. La paleta de colores en tonos de azul y arena refuerza esta conexión con el agua y la naturaleza, transmitiendo calma y fluidez. El isotipo está inspirado en la abstracción de las fases lunares, cuya composición en movimiento simboliza los 5 ritmos y sus transformaciones. Cada uno de los cinco elementos gráficos representa una faceta del flujo, recordando que la luna, al igual que el mar, está en constante evolución.
Las formas minimalistas utilizadas en el diseño permiten una interpretación versátil y abierta, observadas desde distintas perspectivas. A su vez, el isotipo funciona como punto de partida para la creación de patrones y aplicaciones simétricas en composiciones axiales y radiales.

Carga Simbólica
La luna, elemento central en esta identidad, representa:
Renovación y transformación
Energía femenina y fertilidad
Subconsciente, sueños e intuición
Conexión con lo oculto, lo misterioso y el universo
Influencia sobre el mar y las mareas


La gama de azules y turquesas utilizada en esta identidad está inspirada en la profundidad y variabilidad del mar. Los tonos azules representan tranquilidad, confianza y estabilidad, mientras que los turquesas evocan frescura, claridad mental y energía positiva. Estos colores están asociados con la creatividad y la conexión espiritual, transmitiendo una sensación de expansión y libertad.
El color arena complementa la paleta aportando calidez y equilibrio. Representa la tierra y la estabilidad, funcionando como un elemento de transición que une la fluidez del agua con lo sólido. Su tono neutro permite resaltar los matices del azul, creando una armonía visual que refuerza la identidad de la marca.



Se emplea una tipografía sans serif minimalista que aporta limpieza y legibilidad, resaltando la jerarquía del nombre “Liliana De la Vega” dentro de la composición tipográfica.
Esta identidad no solo representa a Liliana como marca personal, sino que también comunica su filosofía de vida: fluir con el entorno, conectar con la naturaleza y abrazar el cambio con creatividad e intuición.
